Revelan tribus urbanas deterioro de instituciones: evangélicos

El Golfo/CdNC.info - Para los evangélicos, la existencia del estilo “emo” entre los jóvenes mexicanos es el resultado de que nos estemos convirtiendo en pepenadores de la basura cultural de otros países, ya que en otras sociedades y culturas eso ya pasó de moda y empezó a ser exportado.

Fue lo expresado por el coordinador general de la Asociación Ministerial Evangélica de Veracruz (AMEV), Ricardo Aquino Alfaro, quien mencionó que los llamados “emos “y otros grupos tribales, no son más que formas de comportamiento social que revelan un deterioro de las instituciones, particularmente de la familia, incluso de la Iglesia, las cuales tienen un gran reto ante estas formaciones de comportamiento social de este tipo entre los jóvenes.

"Podría ser visto como algo muy moderno, pero la realidad es que son estilos que en otras sociedades y culturas ya tuvieron auge, ya pasaron de moda y fueron exportadas a países como el nuestro, por lo que podría decirse que nos estamos convirtiendo en pepenadores de la basura cultural que en otros lados ha impactado", abundó.

Aquino Alfaro agregó que la característica de ese tipo de expresiones es que finalmente no aportan al joven valores o vínculos significativos ni trascendentes, ya que después de esa etapa el joven sigue sintiéndose vacío, desvinculado y totalmente sin propósito, por lo que la familia tiene una responsabilidad muy grande, al igual que la Iglesia.

Reconoció que se trata de un fenómeno que ha cobrado mucho auge, por lo que no se puede solamente descalificarlos y decirles que no aportan nada a la sociedad, sino al contrario, se les debe tomar en serio y reconocer que están ahí y se les deben ofrecer alternativas que les permitan vincularse de manera significativa, la familia es una de ellas, la Iglesia otra.

Por ello, dejó claro que antes de rechazarlos, hostilizarlos o condenarlos, se debe ir a su rescate, aportarles los valores necesarios para que superen eso.

Reconoció que este problema no está dado en el joven en sí mismo, sino en cuanto a las tendencias de conducta que se generan en él, que habitualmente son adictivas o de codependencia, relaciones esclavizantes y comportamientos que devalúan al joven y lo hacen sentirse deteriorado en su integración como persona.

No hay comentarios: