
Las detenciones fueron posibles gracias al trabajo de 100 agentes y a la colaboración ciudadana, mediante denuncias, ya que el intercambio de los archivos se producía a través de las redes P2P, un medio muy extendido en España entre los internautas para hacerse con contenido audiovisual.
De los 41 arrestados, 35 han sido acusados del delito de tenencia y distribución de pornografía infantil a través de Internet mientras que los otros 6 supuestamente han incurrido en el "grooming", es decir en el acoso de menores con fines sexuales en Internet.
En los registros la Policía Nacional ha intervenido 46 discos duros, 3 CPU, 10 ordenadores portátiles, 200 DVD y 3 memorias externas que contienen fotos y vídeos con contenido pedófilo.
Los detenidos provenían de diversos orígenes sociales y entre ellos hay un ingeniero informático, un arquitecto, un mecánico o un controlador aéreo.
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